En esta ocasión se simuló un fuego hecho con cajas forradas con imágenes de llamas, que se situó en unos de los pasillos de la planta baja que salen al patio.
Por este motivo el equipo de evacuación, desconocedor de dónde iban a encontrar el obstáculo, tuvo que elegir una vía de desalojo alternativa a la primera alternativa prevista en el plan de auto-protección. Pese a ello, el simulacro se llevó a cabo en dos minutos y cuarenta segundos, igual que el simulacro del año pasado; tiempo en el que se consiguió desalojar a todos los alumnos, profesores y personal del centros sin ninguna incidencia.
El objetivo principal de esta actividad es la concienciación sobre la necesidad de llevar a cabo el desalojo rápido
y ordenado de las aulas; el conocimiento de las indicaciones sonoras y visuales
para casos de emergencia y tratar de crear respuestas autónomas y ordenadas en
caso de peligro. De modo que se pueda garantizar la seguridad de toda la comunidad escolar. Este simulacro ha servido además para reforzar los puntos fuertes del plan de auto-protección y detectar algún punto débil con el fin de poderlo corregir.
Al simulacro acudió como observador el Inspector del Cuerpo de Policía que felicitó a todo el equipo por haberlo realizado de manera satisfactoria, en un tiempo destacable.
Por este motivo el equipo de evacuación, desconocedor de dónde iban a encontrar el obstáculo, tuvo que elegir una vía de desalojo alternativa a la primera alternativa prevista en el plan de auto-protección. Pese a ello, el simulacro se llevó a cabo en dos minutos y cuarenta segundos, igual que el simulacro del año pasado; tiempo en el que se consiguió desalojar a todos los alumnos, profesores y personal del centros sin ninguna incidencia.
¡¡BUEN TRABAJO!!
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